Regreso a la presencialidad: Las nuevas formas de trabajar en la oficina
Con la apertura cada vez más amplia de las ciudades en nuestro país, el mercado laboral ha vuelto a tener un impulso de cara al regreso a las actividades presenciales en las distintas industrias que, hasta ahora, habían dependido del teletrabajo para mantener su actividad en medio de la pandemia.
Y este nuevo escenario laboral al que nos enfrentamos actualmente hace que este retorno tenga características muy distintas que el que dejamos atrás en marzo de 2020, con nuevos protocolos y procesos que se han ido modificando para adecuarnos a la nueva realidad.
De esta manera, muchas empresas ya han estado promoviendo un retorno seguro a las oficinas y espacios de trabajo, cumpliendo con los protocolos sanitarios y entregando diversas opciones a sus colaboradores, algo que vemos día a día en la industria.
Pasar del teletrabajo al retorno gradual
Hasta ahora, el mejor amigo de los puestos administrativos, de TI y cualquier otro que se pueda realizar frente a un computador en medio de esta pandemia ha sido el teletrabajo, ya que sin este formato muchas personas hubieran perdido sus puestos de trabajo por temas de aforo y la imposibilidad de trasladarse a las oficinas físicas.
Pero, si bien el teletrabajo fue un aporte en este periodo y se considera una experiencia positiva a nivel mundial, también se ha generado una tendencia dentro de las empresas a impulsar el retorno a las actividades presenciales, principalmente en aquellos países con un proceso de vacunación avanzada como en Chile.
Entre los aspectos principales que llevan a esta situación, se encuentra la idea creciente de que el trabajo presencial permite un mayor control de las actividades que realizan los colaboradores.
"Si bien las reuniones "virtuales" permiten sostener la continuidad de las labores en general, siempre es más cómodo tener a las personas en forma presencial, ya que en ese caso es más fácil dar instrucciones y/o comentar temas afines. El control es algo que efectivamente las jefaturas tienden a valorar más, pues estando en la oficina, se sabe de inmediato si las personas están o no, o si están dedicadas a sus labores y no haciendo otras cosas que no correspondan"
Al mismo tiempo, la presencialidad permite que los equipos de trabajo puedan volver a realizar tareas en conjunto sin los limitantes que pone la tecnología, ya que, si bien existían métodos para mantener las labores grupales, la experiencia no es igual si los miembros están juntos de manera física.
"hay que considerar que también está el tema de los problemas de conectividad. Es típico que, en reuniones a distancia, uno o más de los participantes tenga problemas de conexión, lo que a veces hace dramática la comunicación"
De todas formas, la aparición de nuevas variantes y la mantención de los cuidados esenciales para evitar contagios hace que se consideren formatos híbridos que permitan intercalar jornadas presenciales con otras de teletrabajo, lo que se complementa con cambios físicos en las oficinas que permiten cumplir de mejor manera con los protocolos existentes.
“Hot desking”, la nueva tendencia en las oficinas
En el nuevo contexto de presencialidad que vivimos día a día, muchas empresas han optado por ofrecer un nuevo formato laboral que permite cumplir con los protocolos y, a su vez, entregar un espacio cómodo para sus trabajadores, como es el “hot desking” o “escritorios calientes”.
Este formato consiste en tener una cantidad específica de puestos disponibles por jornada para la planta de trabajadores, los cuales se irán ocupando a medida que los colaboradores vuelvan a las actividades presenciales, pero sin tener un escritorio fijo para cada persona.
"Creo que la mayor ventaja del hot desking es la movilidad para las personas y el ahorro en costos para las empresas. Las personas más jóvenes no tendrán problemas en adaptarse a esta nueva modalidad, pero quizás para personas mayores, sobre todo aquellas que poseen puestos de trabajo de mejor calidad puede ser un impacto no menor en su desempeño, ya que preferirían un lugar fijo donde llegar"
Esta idea se ha internalizado desde otras industrias que trabajan por turnos, como por ejemplo la minería, donde las habitaciones de los trabajadores cercanas a las faenas se van utilizando según la disponibilidad de estos espacios.
Así, se evita el uso de efectos personales por parte de los trabajadores y se mantienen los espacios sólo con los elementos básicos para realizar las tareas diarias, algo vital a la hora de evitar posibles contagios por uso compartido de elementos, aunque también puede generar una especie de desapego en los colaboradores, como asegura Mario González:
"Es común ver que la gente tiende a personalizar su puesto de trabajo con adornos, fotografías familiares, etc, pero con el hot desking esa costumbre tenderá a minimizar o desaparecer, lo que también puede impactar en la psicología de algunas personas, al encontrarse con puestos de trabajo despersonalizados o más ‘fríos’"
El modelo híbrido al futuro
Estos nuevos formatos de trabajo van de la mano con el modelo de trabajo híbrido, ya que los puestos pueden ser compartidos por diferentes trabajadores que tengan horarios o turnos diferentes, reduciendo la cantidad de puestos que se debe mantener a diario, de forma que también genere una reducción de costos para la empresa.
"en muchas empresas podrá haber un esquema mixto o híbrido. Por ejemplo, asistir a la oficina en las mañanas y después de almuerzo trabajar desde la casa. Otra opción que se puede barajar es asistir periódicamente a la oficina, una a dos veces por semana, a reuniones de avance de temas y el resto, trabajarlo desde el hogar. Creo que, con el tiempo, las empresas tenderán a acomodar estas modalidades de acuerdo con sus necesidades e intereses"
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