Cómo nos afecta la inflación y cuál es la proyección de cara al inicio de 2022

La crisis provocada por la pandemia en estos últimos dos años ha causado muchos estragos en la economía nacional, situación que se ha reflejado en el aumento de la cesantía -proceso que ha tendido a controlarse en los últimos meses- y el alza de los precios en el comercio y los servicios.
Así, uno de los indicadores económicos que más atención tuvo durante este 2021 fue el aumento explosivo en el Índice de Precios al Consumidor (IPC), el cual terminó el año con un alza de 7,2% entre enero y diciembre, la cifra más alta en los últimos 14 años.
Pero cuál es el verdadero efecto de la inflación en el día a día de las personas o cuáles son los ciudadanos más afectados por esta situación es algo que tienda a ser confuso. Por esto, a continuación, respondemos algunas dudas comunes al respecto.


¿Qué es y cómo afecta la inflación?

En términos técnicos, se denomina inflación al aumento generalizado en los precios de los bienes y servicios de una economía, tradicionalmente especificada a un país o región, durante un periodo de tiempo. Si bien se tiende a demonizar este concepto, hay que destacar que no siempre la inflación es negativa para la economía de un país.
De hecho, una economía sana y con un trabajo de óptimo en mantener la estabilidad debería tener una inflación que donde un 2% de aumento por año. El problema en este caso viene cuando esa inflación llega a niveles superiores, como es el caso de Chile. En este escenario, suben los precios de los productos y servicios que la gente consume día a día, incrementando los gastos de dinero en las personas.
Al mismo tiempo, esta alza de precios hace que disminuya la capacidad de ahorro de las personas, ya que necesitan gastar más para conseguir los mismos productos. Así, también se pierde poder adquisitivo si los salarios de los trabajadores no tienen un alza correspondiente.


¿Por qué aumentó la inflación en Chile?

Las principales razones por las que la inflación aumentó en nuestro país están ligadas a pandemia. En primer lugar, los costos de los productos y servicios aumentaron debido a la pandemia y la falta de oferta en el comercio por las restricciones de movilidad que vivimos en los últimos meses.
Al mismo tiempo, la entrega de beneficios por parte del Estado a las familias más afectadas permitió que hubiera un aumento en el dinero circulante en la economía nacional. La gente tenía mas dinero en sus manos y de esta manera, la demanda por productos y servicios aumentó, mientras que la oferta había disminuido, algo que se mantuvo con la entrega del IFE hasta diciembre pasado.
Esto se vio sumado a la inestabilidad económica que ha tenido el país desde 2019, con un escenario que mantuvo la incertidumbre en gran parte del año que acaba de terminar.


¿A quién afecta la inflación?

El aumento importante de la inflación afecta a todas las personas, ya que todos consumimos bienes y servicios, ya sea directa o indirectamente. Por esto, lo que diferencia la gravedad de este problema es el escenario y la realidad de cada persona.
En este ámbito, el aumento de los precios afecta en mayor medida a aquellas personas que tienen menor capacidad de ahorro, ya que ellos gastan la mayor parte de su sueldo en consumo de servicios y bienes como alimento o transporte. Por esto, se dice que las personas con menor sueldo serán las más afectadas, ya que su dinero rendirá menos que en los meses previos al proceso inflacionario.
Aun así, existen trabajadores cuya remuneración es ajustada anual o semestralmente por el IPC calculado en el periodo definido, por lo que estos podrán recibir un aumento en su salario acorde a la subida de los precios que lo afecta directamente. En estos casos, se recomienda revisar estos aspectos o consultar con las áreas de Recursos Humanos respectivas.


¿Qué se espera para el inicio de 2022?

Si bien los índices económicos han mejorado y junto con el cierre de 2021 terminaron los aportes estatales que habían desestabilizado la relación entre oferta y demanda, el Banco Central no mostró una proyección positiva para 2022.
De hecho, según el último Informe de Política Monetaria la inflación debería mantenerse en torno al 7% durante el primer semestre de este año, para bajar a no menos que un 3% a partir de la segunda mitad del año. De todas formas, todas estas proyecciones podrían cambiar dependiendo de las decisiones económicas que adopte el nuevo Gobierno a partir de marzo, por lo que el escenario aún no está definido para los meses que vienen.


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