En el mercado laboral y el mundo del reclutamiento, uno de los aspectos claves al momento de seleccionar a un nuevo miembro de una empresa son las habilidades que posee para desenvolverse en su nuevo puesto.

Pero estas capacidades no sólo se refieren a los conocimientos técnicos de una persona sobre un puesto en específico, sino que también involucran un crecimiento constante como trabajador y, a la vez, como persona.

Para generar un buen equipo de trabajo, las herramientas cognitivas propias de cada puesto se tienen que complementar con aquellas habilidades blandas que permitan tener un buen ambiente y fortalecer el trabajo en equipo. Aunque la necesidad de fortalecer cada uno de estos aspectos dependerá de las actividades que se realizan.

"De acuerdo a lo que hemos visto con nuestros clientes, mientras más alto el nivel del cargo, son mayores las exigencias y habilidades requeridas. En las empresas en general, se tiende a preferir a aquellas personas que cumplan con un mayor número de habilidades, ya que se pueden adaptar más fácilmente a los cambios que se puedan producir durante su vida laboral"

, argumenta Mario González, jefe de Marketing de ATCOM.

Al mismo tiempo, es importante entender que estas habilidades para un trabajo no son necesariamente las que se obtienen en los estudios, sino que se van sumando y desarrollando en la experiencia laboral y en la propia vida de cada persona.

Habilidades cognitivas, blandas y técnicas

En el mundo actual cada vez se entiende y se protege más al trabajador en su rol de persona, privilegiando su bienestar y comprendiendo que no sólo sus conocimientos específicos nos ayudarán a alcanzar la optimización en nuestros lugares de trabajo. Por esto, las habilidades que se estudian en cada profesional se pueden separar en tres tipos.

Las habilidades cognitivas son aquellas relacionadas a la memoria o al pensamiento del trabajador, además de aquellos conocimientos académicos, pero que actúan más en la forma de ser y de actuar de la persona.

En cambio, las habilidades técnicas son aquellas que le permiten hacer su trabajo de la mejor manera, como los conocimientos asociados a una rutina, a un trabajo, al funcionamiento de una máquina o a la forma de desempeñar mejor una tarea.

Finalmente, Las habilidades blandas son las que nos permiten relacionarnos de forma directa con otras personas, ligadas a la personalidad, la comunicación y el comportamiento.

"Según nuestra experiencia, para un trabajo son necesarios todos los tipos de habilidades. Pero esta necesidad varía. Por ejemplo, una persona que trabaje como peoneta no necesitará demasiadas habilidades blandas, ya que el trabajo es muy específico y no depende de la interacción con otras personas. Por otro lado, una persona que tiene un cargo de supervisión o jefatura, si necesitará tener de ese tipo de habilidades para poder influenciar positivamente en el comportamiento de cada una de las personas a su cargo y a la vez, del grupo como un todo"

, destaca Mario González.

La importancia del conocimiento digital

Si hay un aspecto que ha modificado el escenario laboral en el que nos desempeñamos, es el uso de la tecnología en nuestro día a día, ya sea lo referido a la vida cotidiana y a las labores diarias que realizamos en nuestros trabajos.

Por esto, es crucial que los trabajadores actualicen sus conocimientos en este ámbito, entendiendo las habilidades digitales como una herramienta para desenvolverse de mejor manera en el mundo actual, entendiendo la importancia del uso de redes y plataformas como un apoyo a su trabajo.

"En los años 90, la gran revolución de uso masivo de tecnología fue el correo electrónico y los foros de discusión. Hoy ya eso está quedando en el pasado debido a la inmediatez que impera en las comunicaciones "

, agrega Mario González.

Precisamente, estos cambios acelerados que presenta el mundo de la tecnología deberán empujar a que los propios trabajadores busquen actualizar sus conocimientos, algo que debería ser apoyado por las propias autoridades.

En esta línea, el jefe de Marketing de ATCOM señala que

"es muy importante que las autoridades, impulsen la disminución de la brecha digital en las personas, que normalmente va de la mano de su edad. Las personas mayores se han tenido que adaptar al uso de la tecnología, en cambio, las personas más jóvenes, ya nacieron con ella"

El futuro del mercado laboral

Las nuevas necesidades que rondan el mundo del trabajo han hecho que muchos puestos hayan mutado y se hayan convertido por el uso de la tecnología y la necesidad de automatización de los procesos que viven algunas industrias.

Cargos relacionados al mundo de la inteligencia artificial, automatización, visualización y análisis de datos o experiencia de usuario cada vez son más requeridos en el mercado, asociados a los nuevos hábitos de consumo de las personas y a la necesidad de modernizar el trabajo diversas áreas.

Por esto, el conocimiento tecnológico será clave al momento de analizar las habilidades de cada persona y las herramientas con las que pueda realizar su trabajo. Así, conseguir un equilibrio entre tecnología y el bienestar de las personas es clave en este nuevo escenario.

"La tecnología está sustentada por máquinas, computadores servidores, que funcionan los 7 días de la semana, las 24 horas del día. Para un computador no existen las vacaciones o los feriados de Navidad o fiestas patrias. Eso hace que haya una tendencia de la sobre utilización de los recursos y que se puede extender en forma negativa hacia las jornadas laborales de las personas. Por eso mismo, los llamados "derechos a desconexión", deben ser formalizados y darles la importancia que requieren para lograr ese equilibrio entre el uso de estas tecnologías y la vida familiar de las personas"

, concluye Mario González.

Finalmente, es importante que las personas tomen en consideración estos aspectos y dependiendo de sus intereses, encuentren la forma que mejor les acomode para lograr disminuir la brecha ya sea digital, técnica o de habilidades blandas según los cargos a los cuales están postulando.